pero no tiene flores
ni procesiones de familiares
ni ríos de lágrimas,
un camposanto en ruinas
y las cruces no apuntan al cielo
ni levantan la cabeza, tienen
la cerviz partida en dos.
El perro de mi vecina baila flamenco mientras me sangra a borbotones la herida que me hice anoche cuando intentaba colarme por tu ventana.
¿No son herías y mis-herias?