martes, 30 de junio de 2009

(In) Certidumbre

Siempre queda
la duda
(razonable)

(es el camino equivocado
confundimos el mapa
y estropeamos la brújula
y volvimos a perdernos)

como tantas otras veces

(al lanzar la moneda al aire
caerá de canto).

sábado, 27 de junio de 2009

Una verdad cualquiera

Una mañana de domingo, Verdadescomopuños fue al gimnasio y se encontró con Mentiraspiadosas. Decidieron medir sus fuerzas en el ring. El árbitro, un tipo cualquiera que pasaba por allí, Verdadesabsolutas se llamaba. Verdadesabsolutas determinó que él marcaría las reglas y los pújiles se mostraron de acuerdo. Dientes caídos en la lona, sangre corriendo a borbotones, la ira disfrazada de palabrotas, golpes y golpes. Sonó la campana del final. Nadie pudo salvar de la muerte a Verdadesabsolutas.

Verdades absolutas

Todo termina en puntos suspensivos.

lunes, 22 de junio de 2009

Un día perfecto para Sofia

Hoy sacamos de la chistera
un conejo de la suerte,
un trébol de cuatro hojas
o una bolsa de ilusión,
lo que prefieras.
Podemos arrojar el desencanto
en alguna papelera que encontremos
camino de cualquier parte
y mientras caminamos
a cualquier parte,
encontraremos un anuncio de colonia
del que se ha escapado algún yogur,
que te espera con cuchara
en una isla desierta,
y al llegar, te lo comes enterito
y descubres en el muelle
un gran barco de crucero lleno
de la gente que te importa.
¿Qué te importa hoy
todo lo demás?
Si hoy todo es posible
y los sueños son gratis.

jueves, 18 de junio de 2009

En días como hoy... pongo anuncios, como siempre

Hoymealquilo.
Alquilo mis silencios, mi mutismo,
para que hagas con ellos lo que quieras.
Siteplacepuedestirarlosalapapeleranolosbuscarénolosnecesito
s i e m p r e vuelven solos.

Hoymevendo.
Vendo mis palabra de alquitrán,
lasllenas y l a s v a c í a s,
lasqueestán porlamitad,
las que se clavan
como cuchillos y las que curan
HERIDAS.

Hoymedoy.
Doy todo lo que tengo
y lo que (no)soy
por olvidarme de que soy y tengo,
por ser sólo lo que tú quieras
que sea, que NO
sea yo.

miércoles, 17 de junio de 2009

26??!!

Ventiseis tacos avalan mi existencia, o eso dicen mi DNI, cuando no está perdido, y mi partida de nacimiento, que debe andar por algún cajón secreto de mi casa, en los que todo cabe, pero nada se encuentra. A ratos tengo cinco años y a ratos los echo de menos. A veces vuelvo a los quince, o lo intento. Las más de las veces, me pesan los noventa años con los que nací y algún día quizá moriré, porque tengo el pelo rizado como mi abuela y eso nos asegura, a los de mi estirpe, una vida casi eterna (ya ves, casi nada). No tengo más achaques que ayer, ni más dolencias que las propias de una vida (de) cualquiera, de cualquier vida. Si me miro al espejo, tengo las mismas arrugas que anoche y las mismas ojeras que esta mañana. Siguen aquí los mismos amigos que la última vez que pasé lista y alguno nuevo que está por arrepentirse, las mismas manías que decidí no contarle a ningún psicoanalista y compartir sólo con mi almohada, que ya no se asusta de mis ordinarias extravagancias. Mis vicios siguen intactos, esperando que los saque de paseo porque se están oxidando, y es que no fumo ni aire, mi hígado no tolera la fanta de naranja y desde que le conozco, desde siempre, ya sólo hacemos el amor y casi nunca follamos. Mis gustos siguen siendo míos y paso de compartirlos con nadie, que a estas alturas, a estos veintiseis pisos tan altos, te haces egoísta de cojones, o eso dicen. Doy fe, aunque a veces me abandone, que las tonterías seguirán conmigo sino se cansan de acompañarme. Y, sin embargo, a pesar de toda esta lista de mis cosas inmutables, hoy es diferente y es gracias a tí.

{Gracias ;) }

martes, 16 de junio de 2009

Escribir poesía

es hacerse una autopsia,
extraer el cerebro
y meterlo en formol,
vaciar los pulmones
y quedar sin aliento,
dejar al descubierto
un sucio corazón,
determinar la muerte,
la razón y la causa,
el por qué, el por qué no.

lunes, 15 de junio de 2009

Traqueostomía

Moriré en un restaurante,
en uno caro,
al atragantarme con el hueso de algún ave
que aún no he probado,
y mi acompañante,
compañero y amante,
gritará ¡un doctor!,
pero no habrá ninguno.

Porque todos serán famosos de revista
y tendrán plumas caras,
no habrá boli bic que me salve
de morir allí mismo atragantada.

Ya ves, soy así,
siempre me gustaron
los finales felices,
los que terminan
comiendo perdices.

Soy (qué voy a hacerle)
una romántica empedernida
y me avergüenza
serlo y no tener miedo a confesarlo,
pero qué voy a hacerle,
repito y me repito,
si para este mal
no hay más que remedios caseros y pobres,
y nunca fuí amiga de las curanderas.

[Escribo a ratos, a pulsos e impulsos.
C
uando no puedo respirar me clavo un boli bic en la garganta].

Anuncios por palabras (III)

Me alquilo. Por momentos,
largos o cortos,
o a tiempo completo.
Actividad y precio,
a convenir.
Las más de las veces
no cobro.
Razón: cualquiera sirve.

Anuncios por palabras (II)

Vendo
mentiras piadosas
y verdades a medias.
Un sólo uso.
Fáciles de manipular y adaptar.
También hechas a medida.
Modelo: Engaños 434.

domingo, 14 de junio de 2009

Anuncios por palabras (I)

Busco perra perdida.
Manchas negras y blancas.
Chucho, sin raza.
No para de ladrar.
Responde al nombre de Cordura.
Ruego la deposite en la perrera más cercana
para sacrificio.

martes, 9 de junio de 2009

Lista de tareas pendientes

  • Antes que caduquen, cumplir las promesas.
  • No pisar el freno en la carretera.
  • Besar en el metro a un tipo cualquiera.
  • Sonreir todo el tiempo si voy a una fiesta.
  • Deshojar las flores cada primavera.
  • No hacer esperar a los que me esperan.
  • No echarte de menos cuando me des puerta.
  • Publicar un libro lleno de poemas.
  • Tirar lo que sobra a la papelera.
  • Quedarme callada cuando se requiera.
  • Plantar un naranjo y una enredadera.
  • Construirme una casa entre tus caderas.
  • Guardar los instantes en la cajonera.
  • Si muero algún día, que no sea de pena.
  • Tachar de esta lista alguna tarea.

miércoles, 3 de junio de 2009

Sección de objetos perdidos


Disculpe, he perdido la cordura y no la encuentro,
quizá podría ayudarme,
la dejé en alguna parte,
la pila se desbordaba y, claro, me la quité,
que para fregar mis-neuras es incómodo estar cuerdo,
y ahora que la necesito y la busco,
¡no la encuentro!

Disculpe, quizá no me vendría mal
un pizca de ternura para los días de tormenta
y un poco de lucidez para encontrar el camino
cuando creo que me he perdido
y mis gafas de miope no ven nada.

Disculpe que pida tanto y que sea tan pesada,
quizá tenga también algo
que me cure las manías,
las neuras, las utopías,
y si es gratis, pues mejor,
que no me queda dinero para pagar tanto vicio,
tanto objeto, tanta cosa, tanto tonto desperdicio.

Disculpe, es que me he perdido,
si prometo estar callada y no hacer ruido,
¿podría quedarme allí, en un rincón escondido?,
puede que alguien me eche en falta
o eche de menos mis vicios
y quiera recuperarme de los objetos perdidos.